HEMORRAGIAS

Una hemorragia es cualquier salida de sangre de los vasos sanguíneos. Las hemorragias producen la falta de oxigenación de los tejidos, lo que causa la muerte de estos. Pueden ser externas, internas o exteriorizadas.
            HEMORRAGIAS EXTERNAS
En este tipo de hemorragias la sangre sale al exterior a través de una herida. Las más importantes se producen en las extremidades  (brazos y piernas). Los métodos que se utilizan para detener hemorragias son la compresión directa, la compresión arterial y el torniquete; su aplicación es consecutiva, de forma que si uno no funciona se pasa al siguiente.
              HEMORRAGIAS INTERNAS
        En estas hemorragias el accidentado pierde sangre, pero ésta no sale al exterior, sino que se queda en el interior del cuerpo. Sus síntomas son piel fría, palidez, mareo, tensión baja y taquicardia. Sobre las hemorragias internas no se debe intervenir, sólo se debe avisar urgentemente a los servicios de emergencia y colocar boca arriba al accidentado, con las piernas levantadas.
            HEMORRAGIAS EXTERIORIZADAS
        Las hemooragias exteriorizadas son aquellas que, aun siendo internas, salen al exterior a través de un orificio natural del cuerpo: boca, oído, etc...